Un mundo sin risa

Improvisación libre en la que NADIE PUEDE REÍRSE: Ni quienes están en el escenario, ni quien anfitriona, ni siquiera el público. Si alguien del elenco se ríe, hay castigo. Si alguien del público se ríe, quien causó la risa tendrá castigo.

El castigo puede ser algo trivial como que simplemente se reemplace al/a-la intérprete por otro/a o...

Recibirá algo comestible. Para Argentina, recomiendo galletitas pepas o de maicena. Tú eliges. La persona infringidora se pondrá una galletita en la boca. Puede masticar pero no tragar; te imaginarás el resultado: ¡Un mundo con mucha risa!

El público puede participar si le entregas algunas galletitas para que sean jueces e impongan castigo ¡Cuidado! En mi experiencia, el público disfruta por demás este juego y se le da por arrojar galletitas.

VARIACIÓN: EXTREMO

Algunos improvisadores prefieren sufrir. Para ello he visto dos versiones de castigos que catalogaremos como EXTREMO:

• Shots de vodka (improteatral.com aconseja beber con moderación).

• Bofetadas (sí, he visto una versión en la que se daban una bofetada como castigo. No lo veo bueno... peeeero soy una simple biblioteca).